domingo, 1 de marzo de 2020

Que el divorcio sea una escena triste de tu vida, no una película de terror

El divorcio puede desencadenar una avalancha de sentimientos destructivos que indefectiblemente devendrán en hechos nocivos.  También puede ser un acto que si bien conlleva dolor, se viva con respeto a ese vínculo de amor que una vez se formó.
Y una vez mas...solo depende de cómo cada uno elija vivir cada experiencia.
Cuando un matrimonio se separa empieza una etapa nueva:
Que claramente no fue planificada...
Que genera muchas rupturas, comenzando con el vínculo entre los cónyuges, siguiendo con el hogar de los hijos, las familias políticas, amigos en común, economía etc etc...
Que puede generar sentimientos de frustración, culpa, dolor, enojo...
Que desestabiliza...
Que desarma...
Pero la buena noticia, es que si se la vive con sabiduría,  puede ser solo eso, una etapa amarga de la vida.  La sabiduría implica atravesar cada aspecto previamente mencionado sin quedar anclado en sentimientos negativos. Conectarse con cada uno de esos aspectos para no desentenderse a la ligera de cuestiones que mas tarde van a renacer, porque ciertamente nada que implique tanta ruptura debería tomarse a la ligera. Sabiduría para recordar que ese vínculo q hoy ya no existe, nació del amor.  Sabiduría para entender que nadie que se alimente de ira, odio y reproches puede vivir en paz.  
Paz, tranquilidad...sentimientos subestimados que son sin embargo necesidades básicas para tener salud mental y bienestar.
Y sin intentar esconderse tras fachadas de supuesta calma, cuando se trabajan todos los conflictos que un divorcio provoca, se empieza a vivir una escena distinta, mas bella, entretenida y la película de tu vida tiene un final feliz.O